-No tienes miedo de morir, ¿eh? -dijo Nie Hong-.

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Wu Tao sacudió levemente la cabeza y pensó: "Con su cultivo tres niveles más alto ... la fuerza física inferior de Nie Hong ya está completamente neutralizada. Su poder espiritual desbordante ha dejado las ondas de rayo que han estado golpeando sin cesar la carne de Nie Tian. No hay necesidad de continuar esta batalla, de lo contrario ... "

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Nie Xian frunció el ceño y dijo, "Si esto continúa, Nie Tian probablemente terminará gravemente herido o incluso discapacitado por el resto de su vida. A pesar de que alentamos las batallas dentro del clan, sólo se les permite a condición de no ser demasiado excesivo. Sr. Wu, ¿... cree usted que deberíamos poner fin a su lucha? "

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"Sí", respondió Wu Tao. -Si insisten en pelear, me temo que Nie Tian será terriblemente herida. Justo cuando estaba a punto de continuar hablando, sintió que alguien a la distancia lo miraba.

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Subconscientemente, trazó la fuente de esa mirada.

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El abuelo de Nie Hong, Nie Beichuan, había aparecido en la esquina suroeste de la plaza sin que nadie lo notara.

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Se quedó allí con las manos cruzadas a la espalda, mirando a Wu Tao con una expresión profunda, como si supiera que iba a tratar de detener la pelea.

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La expresión de Wu Tao parpadeó. Su boca abierta no hizo ruido; En cambio, suspiró interiormente.

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Era el anciano invitado del clan Nie que había sido, por casualidad, reclutado por Nie Beichuan. Comprendía claramente que el tiempo de Nie Donghai era limitado y que Nie Beichuan lo reemplazaría en un futuro próximo.

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Sabía que si todavía deseaba seguir trabajando para el clan Nie, tenía que entender la situación y hacer lo inteligente.

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Nie Xian rápidamente siguió su mirada y vio a Nie Beichuan de pie no demasiado lejos.

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"Señor. Wu? "Dijo suavemente.

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"Hay ciertos asuntos que ... ni tú ni yo podemos hacer nada." Wu Tao palmeó suavemente el hombro de Nie Xian. -Construya usted mismo. Espero que puedas romper hasta el noveno nivel de Qi Refining tan pronto como sea posible y ganar el favor de la secta de Cloudsoaring. Al final del día, eres simplemente un descendiente de una rama del clan Nie. Sólo cuando te conviertas en un discípulo de la secta Cloudsoaring tendrás algo que decir en el clan Nie.

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Una mirada de disgusto podía verse en el rostro juvenil e inmaduro de Nie Xian, pero asintió y se abstuvo de decir algo más.

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En la plataforma alta del templo de piedra, la cara de Nie Donghai se volvió repentinamente sombría al notar el segundo hermano Nie Beichuan, y rápidamente se dio cuenta de por qué Wu Tao no detuvo la pelea, tan sutil como era.

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-¿Sólo porque no he abandonado mi posición? -se dijo Nie Donghai, sintiendo un profundo odio dentro de si

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¡BOOM! ¡BOOM! ¡BOOM!

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Al ver el revestimiento de la victoria, los espíritus de Nie Hong se elevaron. Una vez más atacó a Nie Tian, ​​y relámpagos cian relucientes continuaron pasando de su puño al cuerpo de Nie Tian.

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Las manos de Nie Tian se volvieron tan negras como el hierro, y las columnas de humo negro emanaron entre sus dedos.

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Sus mangas se rompieron en pedazos y hilos de rayos que se asemejaban a pequeñas serpientes cian bailaban alrededor de sus brazos desnudos.

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Cada vez más hilos de rayos infiltraron su cuerpo, donde se reunieron y se construyeron en cuerdas.

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¡THUM THUM!

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Nie Tian no pudo evitar retroceder. Bajo el ataque feroz de Nie Hong, cada vez que levantaba sus manos para defender, sus movimientos se volvieron aún más rígidos y más impotentes.

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Se olvidó por completo del dolor en sus brazos, aunque su frente estaba cubierta de sudor. Sus ojos eran como una estrella brillante y brillante en el cielo nocturno, rebosante de profundos misterios.

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"¡Estás terminado! ¡Haha! "Nie Hong se echó a reír con emoción mientras sus puños enredados en el relámpago penetraban la lenta defensa de Nie Tian, ​​golpeando sin piedad su pecho.

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"¡No!" Wu Tao gritó inconscientemente.

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Nie Xian también no podía dejar de gritar, "Nie Hong, alto!"

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En la plataforma alta, el rostro de Nie Donghai estaba cubierto de sudor, jadeando sin parar, como si estuviera aún más agotado que Nie Tian.

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Sus ojos eran fríos como el agua del lago mientras miraba a la tranquila y compuesta Nie Beichuan, con la esperanza de oírle cancelar esta pelea.

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Sin embargo, Nie Beichuan no dijo una palabra.

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¡BOOM! ¡BOOM! ¡BOOM!

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Los latidos de Nie Tian crecieron más rápido y más fuerte. Al ver que el puño de Nie Hong se acercaba rápidamente a su pecho, sintió que había algún tipo de poder en su cuerpo, a punto de estallar.

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Sin embargo, cuando quería obtener el apoyo de ese poder, no podía localizarlo.

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Todo lo que podía sentir era dolor y entumecimiento en todo su cuerpo. De repente, la ira y la desesperación tomaron el relevo al darse cuenta de que el poder se negaba a cooperar.

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¡THUM THUM! ¡THUM THUM!

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Abrumado por la indignación y la desesperación, su latido del corazón una vez más acelerado!

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¡No se dio cuenta, pero su corazón había empezado a correr dos veces más rápido que de costumbre entre esas explosiones de rayos!

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¡Justo en ese momento, parecía como si una voz animadora saliera de su cuerpo y sus órganos! A partir de entonces, ya no se veía afectado por el relámpago residual que quedaba en su interior.

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¡De repente, una fuerza bárbara explotó locamente de dentro de su carne!

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Whoosh

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Antes de que el puño mortal de Nie Hong pudiera aplastarse contra su caja torácica, rápidamente extendió las manos y agarró la muñeca de Nie Hong con gran precisión.

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¡La mano de Nie Hong se detuvo a sólo media pulgada del torso de Nie Tian y no pudo avanzar!

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Con el puño cerrado bruscamente, la emocionada cara de Nie Hong fue inmediatamente absorbida por la confusión, como si no pudiera comprender lo que acababa de suceder.

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En el momento siguiente, Nie Tian levantó su pierna y pateó Nie Hong duro en el abdomen.

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¡BOOOM!

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La mano de Nie Hong seguía siendo mantenida firmemente, lo que le hacía imposible escapar. Bajo el impacto de la poderosa patada de Nie Tian, ​​el cuerpo inferior de Nie Hong fue lanzado al aire como un columpio.

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Mientras el cuerpo volador de Nie Hong retrocedía debido a la gravedad, Nie Tian se retractó de uno de sus pies antes de que él aplastara con fuerza la caja torácica inferior de Nie Hong con su rodilla.

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KAH CHA! ¡OWWW!

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Se oyó un ruido de huesos, junto con Nie Hong gritando como un cerdo siendo asesinado.

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Sólo entonces Nie Tian liberó su agarre en la muñeca de Nie Hong. Él se congeló, y una extraña mirada apareció en su rostro mientras trataba de calmarse y buscar la fuente de esa fuerza repentina y salvaje.

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Sin embargo, con la crisis que se relevaba y su mundo interno que calma otra vez, su corazón que golpeaba también volvió rápidamente a normal.

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Aquella fuerza emergente parecía haberse disipado instantáneamente en sus miembros y carne, y ya no podía sentirse.

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"Extraño…"

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Nie Tian ni siquiera miró a Nie Hong. Frunciendo las cejas, parecía completamente absorto en su propio mundo.

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Nie Hong estaba acurrucada en el suelo, espasmódica como una gamba de tamaño humano y dejando escapar los gritos que perjudicaban los tímpanos de todos.

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"Uh ..." La cara de Nie Xian estaba llena de asombro.

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"¿Cómo puede ser?" Wu Tao, sorprendido y confundido, miró fijamente a Nie Tian, ​​que estaba profundamente en sus pensamientos, ya Nie Hong, quien estaba gritando sin cesar de dolor.

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Todos los niños del clan Nie que presenciaron la pelea, estaban abrumados por el repentino cambio de la situación y no tenían idea de qué hacer.

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Nie Yuan, que había clamado para enseñar a Nie Tian una lección después de Nie Hong, ahora estaba mirando al incomparablemente miserable Nie Hong. Sus ojos rápidamente se llenaron de miedo, y él comenzó a esconderse en silencio.

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A pesar de que los puños de Nie Tian eran negros, con un humo oscuro que se elevaba entre los huecos entre sus dedos, permanecía inmóvil como una montaña. En contraste distinto, Nie Hong estaba tumbada en el suelo, llenando el aire de fuertes gritos.

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En este momento, parecía que Nie Tian había dejado una cicatriz permanente en las profundidades del corazón de Nie Hong.

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En la plataforma alta del templo de piedra, Nie Donghai casi colapsó después de experimentar un cambio tan radical. Su cuerpo flaco apenas lograba mantenerse de pie mientras se apoyaba contra los pasamanos de piedra.

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Sus ojos, brillantes como los últimos rayos del sol poniente, miraban fijamente a Nie Tian y brillaban con una luz especial.

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